¿Prometes con frecuencia que no te entregarás a tus peores hábitos y luego te encuentras realizándolos sin siquiera pensar? ¿Sientes que nunca dominarás los hábitos saludables que siempre has soñado adoptar?

¿Cambiar se siente como una batalla cuesta arriba? En este tema, descubrirás 23 hábitos simples que cambiarán tu vida y te facilitarán abandonar esos comportamientos no saludables. Los errores y deslices son magníficos maestros, si elegimos aprender de ellos en lugar de castigarnos.

EL PROCESO DE CAMBIAR HÁBITOS

Nuestros cerebros están programados para adaptarse a nuestros hábitos, haciendo que las acciones parezcan naturales con el tiempo. El problema es que, cuando queremos cambiar nuestros comportamientos, puede sentirse difícil o imposible crear nuevas rutinas.

Esto es normal. Y, con la repetición, nuestros hábitos de reemplazo también pueden volverse naturales. Solo tenemos que superar el incómodo bache inicial que acompaña al inicio de cualquier nueva práctica.

La buena noticia es que, gracias a la neuroplasticidad, el cerebro puede formar nuevas vías neuronales a través de la implementación continua de hábitos saludables. Tomará tiempo, pero simplemente necesitas practicarlos hasta que se vuelvan tan automáticos como cepillarte los dientes. Considera estas pautas mientras realizas cambios saludables en tu vida: •

Pregúntate:

¿Esto es bueno para mi cerebro o malo para él?

Este es el primer paso y el secreto neurocientífico más importante para cambiar tus hábitos. Antes de tomar cualquier decisión, toma un momento para pensar si mejorará tu cerebro o lo dañará. •

Identifica qué quieres cambiar y por qué. Escríbelo para una mayor responsabilidad. También identifica las posibles consecuencias de no cambiar y sé lo más específico posible. •

Evita soluciones drásticas o rápidas a favor de prácticas a largo plazo y sostenibles. Incluso los pequeños cambios se suman. •

Sé indulgente contigo mismo durante el proceso. Los errores y deslices son magníficos maestros, si elegimos aprender de ellos en lugar de castigarnos. Solo vuelve al camino lo antes posible y sigue intentándolo. •

Establece un ritmo durante los primeros 1 a 6 meses. Todos tienen su propio cronograma sobre cuánto tiempo llevará que un nuevo hábito se adhiera. •

Celebra tus éxitos en el camino para ayudar a reforzar el comportamiento. • Entre 6 y 12 meses, probablemente encontrarás que tus nuevos hábitos comienzan a sentirse rutinarios.

23 HÁBITOS SIMPLES QUE CAMBIARÁN TU VIDA

¿Quieres comenzar a agregar hábitos saludables para el cerebro que faciliten dejar atrás tus malos hábitos? Aquí hay 23 ideas que puedes implementar fácilmente ahora mismo:

Primeros Cinco Pasos

  1. Organízate. Los espacios desorganizados crean desorden mental y pueden estresarte. Esto puede hacer que te involucres reflexivamente en hábitos que no te sirven. Mantén el orden en el hogar para ayudar a prevenir la abrumación.
  2. Evita la multitarea. Cuanto más tareas hacemos, menos eficientes nos volvemos. La falta de enfoque y distracción pueden convertirse en una norma diaria. Concéntrate en una cosa a la vez.
  3. Controla las porciones. Comer en exceso es un estilo de vida para muchos estadounidenses. Recalibra tu sentido de porciones sensatas siendo consciente de y adhiriendo a tamaños de porción apropiados.
  4. Muévete todos los días. El ejercicio es una inversión en nuestra salud mental a corto plazo y nuestra función cognitiva a largo plazo. Es imprescindible para sentir y pensar lo mejor posible. ¡Incluso una caminata rápida cuenta!
  5. Ejercita tu mente. Reemplaza los malos hábitos con actividades que estimulen tu cerebro, como deportes, rompecabezas, lectura, baile, cualquier cosa que te haga pensar.

Cinco Pasos más

  1. Comienza un diario de salud. Escribir tus objetivos y progreso revela patrones de comportamiento y te ayuda a alcanzar objetivos.
  2. Intenta el trabajo en equipo. Comenzar un grupo con un objetivo unido puede ayudar a mantener a todos responsables e inspirados mientras realizan cambios positivos en la salud.
  3. Practica la higiene del sueño. Apaga los electrónicos al menos 1 hora antes de dormir, mantén un espacio oscuro, y duerme y despierta a las mismas horas. Estas son solo algunas prácticas que fomentan un mejor sueño y mejores decisiones.
  4. Elimina la comida chatarra. Los alimentos ultraprocesados, el arroz blanco y el pan, y otras opciones altas en azúcar/bajas en fibra están asociados con niveles bajos de energía, problemas de salud mental e incluso pérdida de memoria. Estos pueden obstaculizar los cambios en tu vida.
  5. Acude a chequeos regulares. Conoce tus mediciones de salud más importantes, incluyendo índice de masa corporal (IMC), glucosa en sangre en ayunas, y niveles de vitamina D, proteína C reactiva y ferritina. Los problemas de salud física están asociados con una función cerebral reducida, lo que puede mantenerte atrapado en prácticas diarias no saludables.

Agrega Estos Otros Cinco Pasos Más

  1. Toma suplementos básicos. Las dietas modernas a menudo carecen de los nutrientes que necesitamos. Los suplementos pueden ayudar a mejorar el poder mental que necesitamos para mantener nuevos hábitos.
  2. Evita el alcohol. Beber incluso cantidades “moderadas” de alcohol es perjudicial para la salud. El consumo excesivo es tóxico para todos los sistemas del cuerpo y contribuye a la toma de decisiones pobres. La abstinencia es lo mejor.
  3. Asume la responsabilidad. Culpar a otros y adoptar una mentalidad de víctima nos mantiene sintiéndonos estancados e impotentes en nuestros malos hábitos. En cambio, ve tu parte en las situaciones y trabaja en lo que puedes cambiar.
  4. Cuestiona tus Pensamientos Automátuicos Negativo:. Los pensamientos automáticos negativos destruyen lentamente nuestra salud mental, creando depresión
  5. Sé realista. La positividad tóxica, o el rechazo de todos los pensamientos negativos, tampoco es útil. Un cierto nivel de ansiedad nos mantiene alerta, promueve nuestra seguridad y nos motiva a realizar cambios saludables.

Próximos Cinco Pasos

  1. Practica ir más despacio. La respiración diafragmática y la meditación son solo algunas formas de hacer una pausa en tu día, reducir el estrés y distraerte de participar en hábitos poco saludables.
  2. Piensa antes de responder. Si tienes la costumbre de decir “sí” a cosas que quieres decir “no”, haz una pausa. Piénsalo bien en su lugar y asegúrate de que realmente tienes el deseo, el tiempo y la energía.
  3. Establece tiempo libre de pantallas. Smartphones, televisores, tabletas: nuestras pantallas pueden volverse adictivas. Intenta evitar tomar tus dispositivos sin pensar.
  4. Disfruta de la naturaleza. El tiempo al aire libre puede reducir el estrés, mejorar el ánimo, mejorar la cognición y alejarnos de esas pantallas siempre presentes.
  5. Di la verdad. No necesitas adoptar un enfoque completo de “sin filtros”. Solo sé honesto, especialmente contigo mismo, acerca de tus hábitos poco saludables.

Último Tres Pasos

  1. Procesa tus emociones. Evitar o suprimir tus sentimientos puede hacer que surjan de maneras que perpetúan comportamientos que dañan tu salud.
  2. Desafíate a ti mismo. Para salir de tu rutina, intenta algo novedoso, como un nuevo pasatiempo o idioma. Esto mantiene nuestros cerebros agudos, activos y comprometidos.
  3. Acepta el proceso. El cambio no ocurre de la noche a la mañana. Sé paciente, aprende de tus errores y sigue intentándolo.

Fuente: Clínicas Amén

Facilitador: Serafín Contreras Galeano

Entrenador Profesional En Salud cerebral.

Licenciado Por el Dr. Daniel Amen

 

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